¿Cómo obtener la rebaja por gastos de educación por hijos?
Con la llegada del nuevo año, son varias las acciones que deberás realizar para ordenar tus finanzas de manera correcta. Incluso, puedes solicitar una rebaja de impuestos en caso de que tus ingresos no den abasto en esta nueva Operación Renta 2021. Toda vez que cumplas con los requisitos, hayas declarado los gastos educativos y cuentes con las características que se exigen para postular.
A continuación te presentamos los pasos que debes seguir para obtener la reducción contributiva… Siempre y cuando compruebes de forma organizada las inversiones que destinas a la educación de tus hijos.
¿Qué es la rebaja de impuestos por gastos en educación?
Antes de que obtengas las recomendaciones, es importante que cuentes con una definición más técnica acerca de la rebaja de impuestos por gastos en educación. Esta corresponde a la posibilidad financiera que el fisco brinda a los ciudadanos para que los gastos totales del año calendario no afecten a la renta que reciben por cada mes trabajado.
Este beneficio tiene un cupo máximo sobre las 4 UF (Unidad de Fomento), algo así como 125.000 pesos chilenos por cada hijo. Sin embargo, esa cifra debe ser dividida entre ambos padres en la Declaración de Renta, proceso que te explicaremos con mayor profundidad más adelante.
Otro aspecto que debes conocer acerca de esta rebaja es que no aplica cuando los hijos en cuestión ya estén cursando la educación superior o superen los veinticinco años de edad. Además esta acción tributaria, que data del 2012, permite racionar los ingresos con la intención de que no pierdas activos durante el período.
¿Cómo realizar una declaración de gastos educativos?
Si existe alguna información que no contienen los portales relacionados con el tema es que, para poder realizar la solicitud, se torna necesario completar la declaración de la renta antes mencionada. Mediante una declaración jurada simple, que debe ser efectuada antes de abril, los padres deberán poner de manifiesto los gastos llevados a cabo durante la temporada. Y, también, tendrán que ocupar el asistente de cálculos del crédito (disponible en el sitio de Chile Atiende u otras páginas afines).
El Servicio de Impuestos Internos posee una herramienta llamada «Simulador del beneficio por gastos educacionales» con la que podrás corroborar si cumples con los requisitos. Una vez dentro de esta, resolverás tus dudas crediticias y te enterarás acerca del monto que podrás utilizar en esta rebaja. Allí deberás rellenar cada recuadro que aparezca ante ti con la información solicitada: sueldos, rentas y honorarios, entre otros. Luego aparecerá de manera automática el total señalado.
¿Quiénes pueden postular al beneficio?
Pese a lo simple del trámite, has de saber que no todos los padres pueden optar al beneficio. Existe una serie de requerimientos que solo cumplen algunas familias, como no haber superado los 8.038.936 pesos chilenos en su renta anual. Este tope aplica para los padres por separado. Una vez sumados los montos de ambos progenitores, tampoco pueden llegar más allá de los 22.421.472 pesos. En caso contrario, quedan fuera de manera instantánea de la postulación.
También, pueden acceder al beneficio las personas que posean hijos en los siguientes niveles educacionales: preescolar, enseñanza básica y enseñanza media. Como ya pudiste notar, la rebaja no corre en caso de que tus descendientes se encuentren cursando sus estudios en algún preuniversitario, centros de formación técnica, institutos profesionales o universidades tradicionales. De todas formas, antes de postular a la reducción de tus impuestos, te será bastante conveniente revisar si el instituto en cuestión pertenece al Consejo de Rectores de Chile (CRUCH) o el estado lo reconoce como tal.
¿Qué otros requisitos se exigen para poder acceder al beneficio?
Además de lo mencionado en puntos anteriores, otros requisitos que solicitan desde el SII incluyen, por ejemplo, que la suma de las rentas entre padre y madre no exceda las 792 UF, es decir, un monto cercano a los 670.000 pesos mensuales. También es necesario que la asistencia de los alumnos alcance el 85 % en el libro de anotaciones del centro educativo. No obstante, esta última exigencia puede ser no tomada en cuenta si es que los interesados logran acreditar que el incumplimiento de las asistencias se debió a motivos de fuerza mayor u otras circunstancias justificadas.
En caso de que el sistema detecte irregularidades, infracciones o delitos asociados durante el proceso, los postulantes deberán responder ante la Ley 19.880. Esta es la encargada de establecer las bases legales correspondientes.
Las solicitudes restantes del SII están relacionadas con la inexistencia de condenas a penas aflictivas, antecedentes regulares sobre la situación de ambos padres u otros documentos que pueden pedir los agentes del estado. Otra recomendación para que afrontes el proceso con éxito es que mantengas tus archivos en regla, y que no aparezcas como moroso ante el sistema de cobros encargado.
Algunas recomendaciones finales
Con todos los documentos a la mano, la situación tributaria en regla, los antecedentes legales sin expedientes negativos y la declaración de la renta establecida según las normas, no deberías tener problema alguno para solicitar la reducción de tus contribuciones por gastos en educación. Eso sí, recuerda que tus hijos deben cumplir con los requisitos solicitados tanto en edad como en asistencia a clases o nivel cursado. Solo así será posible completar los formularios disponibles en el sitio oficial del Servicio de Impuestos Internos. ¡Hay múltiples herramientas que te permitirán definir si cumples o no con lo pedido por el sistema!
Ten en consideración que este beneficio está disponible desde hace casi una década, por lo que no debería existir ninguna dificultad en la red para completar el proceso como corresponde. En caso de que no logres finalizar la postulación por errores ajenos, se recomienda contactar de forma inmediata al SII o bien asistir a alguna de sus oficinas habilitadas a lo largo del territorio nacional.
No dejes pasar la oportunidad de obtener una rebaja de impuestos y, así, ahorrar dinero que puedes destinar a otros proyectos del hogar. Declara tus rentas, pon tus números en orden y postula ya al beneficio estatal. ¡La educación de tus hijos lo agradecerá!