factura electronica
Las personas naturales de segunda categoría como las personas jurídicas tienen la posibilidad dede emitir tanto una factura electrónica como una boleta electrónica, dependiendo del fin de dichos documentos. Si no tienes claro cuál es la diferencia entre ambos, a continuación te dejaremos claro de qué trata cada uno, las obligaciones relacionadas y las divergencias que existen entre ellos.
Una factura electrónica es un documento de carácter estrictamente comercial que tiene por fin reemplazar la factura física emitida en una transacción. Una factura de este tipo denota una acción ya realizada; es decir, la compraventa de un producto o servicio. Además, forma parte de los llamados DTE (Documentos Tributarios Electrónicos).
Toda factura, tanto electrónica como física, tiene una validez fiscal total dentro de la economía de la cual forma parte. Asimismo, según la información que puedes revisar en la página del SII, toda factura debe contar con lo siguiente.
Una la boleta electrónica cuenta con todas las características de una factura física, y tiene la misma validez legal. Además, este documento electrónico va dirigido a un intermediario y no al consumidor final. Luego abordaremos en profundidad esta cuestión.
Una boleta electrónica, al igual que el DTE mencionado en el apartado anterior, es un documento de vigencia legal que va dirigido al consumidor final. Este documento virtual tiene por fin reemplazar a la boleta física y agilizar los procesos de emisión de la misma.
Una de las características de las boletas es que puedes emitirlas en terreno. A la vez, dicha situación requiere que dispongas de un dispositivo electrónico que cree el documento en zonas remotas. En este sentido, la conectividad es un factor esencial para emitir boletas de forma correcta.
Otra de las características preponderantes de esta clase de boletas es que contienen en detalle el pago del IVA, pues el consumidor final, al que va dirigido este documento, es el encargado de pagar este impuesto. Según la información que puedes revisar en el sitio del Servicio de Impuestos Internos, esta boleta virtual debe contener la siguiente información.
Una de las principales ventajas de estas boletas es que no deben ser remitidas al Servicio de Impuestos Internos. Además, al igual que la factura electrónica, esta boleta virtual forma parte del paquete de Documentos Tributarios Electrónicos o DTE. Tú, como profesional independiente, tienes la posibilidad de emitir tanto boletas como facturas desde el sitio web del SII con agilidad y premura, así como guías de despacho y notas de crédito.
Preocúpate de tus ventas.
Nosotros hacemos tu Contabilidad y Gestión de personal
Aparte de los beneficios que conllevan estos documentos legales, es necesario que sepas que, al emitir cualquiera de los anteriores, debes cumplir con ciertas obligaciones.
La diferencia fundamental entre boleta y factura electrónica radica en un punto fundamental: esta última va dirigida a un intermediario, mientras que la primera va dirigida al consumidor final. Esa diferencia se traduce en la información que contiene cada uno de estos documentos. Sin ir más lejos, en la boleta electrónica no es necesario que aparezca en detalle la información del comprador.
Las facturas electrónicas , por otra parte, deben contener tanto los datos del vendedor como del comprador. Este último solo es un intermediario, y la ley no lo considera como consumidor final.
El primer beneficio, que se encuentra ligado a las obligaciones del emisor, es una organización detallada de las boletas y facturas emitidas
. Con esta acción te aseguras de que los pagos de contribuciones serán llevados a cabo por tu contador de forma pertinente.
Otro beneficio es la mejora de los procesos de documentación, y, por ende, de la logística interna de tu empresa. En las páginas del SII quedan archivadas todas las boletas y facturas de forma ordenada y por periodo, por lo que podrás acudir a ellas cuando quieras.
Asimismo, podrás enviar boletas y facturas directamente a tus clientes sin necesidad de reunirte con ellos ni de tener un documento físico. Esto optimiza la acción, y respalda la acreditación de la compra-venta efectiva.
Como prestador de servicios o vendedor de algún producto en específico, ahora estás al tanto de la naturaleza de ambos documentos, de cuáles son tus obligaciones como emisor y de las diferencias existentes entre estos. Así podrás tomar mejores decisiones y emitir de forma correcta el documento que requieras, sea una boleta o factura electrónica.