Más allá del Starbucks
Para muchos puede parecer un sueño utópico trabajar desde la casa, sin responder a horarios fijos, manejando tus propios tiempos y con la mayor flexibilidad posible. Este es el modo de trabajo «Freelance» que cada día se hace más popular en nuestro país. Consiste en derivar una tarea o un servicio a una persona que no está presente físicamente, que pueda realizarla a larga distancia y evaluamos solo el trabajo terminado, quedando el desarrollo a criterio de este tercero. Pero, ¿cuáles son las ventajas y desventajas de este modo de trabajo?
Beneficios
Entre los beneficios más directos que puede brindar esta modalidad de trabajo están:
- No depender de horarios fijos
- Captar referentes emergentes de las distintas disciplinas que por su buena calidad muchas veces no tienen mucho tiempo
- Mayor flexibilidad
Desventajas
Entre las desventajas podemos identificar rápidamente:
- Dificultad en la fluidez comunicación
- No estar muchas veces en sintonía con las expectativas de quién requiere el servicio
y probablemente la más identificable por todos y es donde quiero detenerme:
Encontrar un lugar apropiado y productivo para trabajar
Es quizás la decisión más difícil de tomar y asumir, por la comodidad que significa trabajar desde la casa. Pero seamos realistas, es lo menos productivo que hay (en la mayoría de los casos). Y si tienes hijos, aún peor.
Es por esto que la mayoría de los «Freelancers» recurre a lugares como cafés, en los que tienes que pagar un precio no menor a 4 mil pesos para acompañar el trabajo de un buen café.
Pero, ¿Hay otra alternativa?
En los últimos años, se ha ido instaurando en Chile, lentamente, el concepto de «Coworking«, que consiste en un lugar compartido dedicado exclusivamente a quienes usan esta modalidad de trabajo. Esta innovación funciona mediante planes mensuales, anuales o diarios, en los que por una tarifa fija puedes usar todo el tiempo que quieras el lugar, brindándote herramientas esenciales como Wifi de alta velocidad, un lugar cómodo de trabajo, salas de reuniones y talleres, en caso que necesites y, obviamente, el tan valorado café.

Lugares como estos se vuelven cada vez más cotizados en Chile, que de la mano de las oficinas virtuales en Santiago, llegan tanto para abaratar costos como para aumentar la productividad de quienes deciden alejarse de la manera tradicional de trabajar.
No esperes más, pregunta por precios, planes y modos de uso y ¡únete a la nueva forma de trabajar!